Arte y cultura

DINALO-UPIDIR no puede emitir paz y salvo de obras musicales que solo SAYCO representa

El Tribunal Superior Del Distrito Judicial de Cúcuta Sala Civil – Familia, en sentencia del 30 de abril de 2025, confirmó que el municipio de San José de Cúcuta es responsable por la infracción a los derechos de autor de las obras musicales representadas por SAYCO, en el concierto ESPINOZA PAZ TOUR COLOMBIA realizado en el mes de marzo de 2019 que se llevó a cabo con comprobante de pago del denominado Gestor Individual DINALO UPIDIR.

El concierto “ESPINOZA PAZ TOUR COLOMBIA” que se llevó a cabo en el año 2019 se realizó sin la licencia o comprobante de pago por derecho de autor que emite la Sociedad de Autores y Compositores de Colombia,– SAYCO – quien es el representante de las obras musicales presentadas en el evento. Mediante un fallo emitido el 30 de abril el Tribunal Superior del Distrito Judicial de Cúcuta Sala Civil – Familia confirmó la decisión tomada por el Juzgado Tercero Civil del Circuito de Cúcuta en noviembre del año pasado y declaró al municipio de San José de Cúcuta como responsable administrativa y patrimonialmente por omitir el pago a SAYCO.  

“Realizarle pagos a gestores individuales que no poseen los derechos de autor de las obras musicales de los compositores colombianos implica un detrimento en el recaudo para los autores y socios de SAYCO quienes dejan de percibir el dinero que les corresponde al utilizar sus canciones en eventos, conciertos y medios de comunicación, una campaña de concientización que viene trabajando SAYCO para que el público en general, alcaldías, gobernaciones, y entes gubernamentales no se dejen engañar por terceros como DINALO-UPIDIR quienes no tienen ninguna potestad de licenciamiento para el uso de las obras que representa SAYCO”, de acuerdo a lo expresado por el gerente de SAYCO, César Ahumada.  

Esta sentencia reafirma la legitimación que goza SAYCO por ley, como gestora colectiva de los derechos de autor reconocida y autorizada por la Dirección Nacional de Derecho de Autor (DNDA), con base en sus estatutos, los acuerdos de afiliación y los contratos de representación reciproca suscritos con sociedades extrajeras. Aclarando, además, que las sociedades de gestión colectiva no están obligadas a probar la representación de sus miembros, ya que esta representación se presume.

 Las alcaldías deben realizar la validación de los requisitos establecidos en la Ley 1493 de 2011 para la autorización de espectáculos públicos, los cuales incluyen, entre otros aspectos, la revisión de la documentación pertinente y el cumplimiento de las normativas relacionadas con derechos de autor y seguridad pública; y que en este caso en particular, el municipio de Cúcuta incurrió en error al omitir la verificación de la autorización previa y expresa que debía emitir SAYCO, entidad encargada de gestionar los derechos de autor para el uso de las obras musicales ejecutadas durante el evento público denominado “ESPINOZA PAZ TOUR COLOMBIA” que tuvo lugar en la Plaza de Banderas del municipio de San José de Cúcuta, los días 30 y 31 de marzo de 2019.

Generales

_Entre ellas se cuentan las 365 hectáreas reclamadas de la parcelación Mechoacán, donde se configuró uno de los episodios más violentos de despojo, abandono forzado y desplazamiento en el Cesar._

La Unidad de Restitución de Tierras (URT), a través de su Dirección Territorial Cesar – La Guajira, interpuso cuatro demandas que buscan beneficiar a más de 20 familias cesarenses del centro del departamento. Se trata de campesinos víctimas del conflicto armado interno, quienes con base en la Ley 1448 de 2011, reclaman el restablecimiento de derechos sobre el hogar que, aseguran, les pertenece. 

De dichos procesos, interpuestos ante el Juzgado Civil del Circuito Especializado en Restitución de Tierras de Valledupar, destaca uno que involucra a diez grupos familiares víctimas de las Auc. En el pasado el paramilitarismo les forzó a abandonar 365 hectáreas de la parcelación Mechoacán, ubicada en la vereda Las Palmitas, en zona rural de La Jagua de Ibirico. Se trata de una región en la que se perpetró uno de los desplazamientos más violentos y masivos en la historia del Caribe colombiano.

Tras 29 años de este hecho, la justicia transicional ahora considera el proceso llevado por la URT, que pretende la reparación material y restitución del derecho a la tierra de los reclamantes. Ellos nunca abandonaron la vocación campesina que los caracteriza, a pesar de haber sido obligados a abandonar sus terruños. Mechoacán, un predio que supera las 4.000 hectáreas, desde inicios de los 90 fue epicentro de acciones armadas por parte de los paramilitares, configurando despojo en beneficio de intereses de extracción minera.

Más al sur del Cesar, en zona rural de Pelaya, también se dieron situaciones violentas que, 30 años después, son motivo de gestión de la URT. La entidad asumió la defensa de los derechos de tres grupos familiares que fueron forzados a abandonar la tierra por asesinatos selectivos, intimidación y extorsiones de las autodefensas, en un tiempo en el que el conflicto se agudizó en la región.

Tras surtir el procedimiento en etapa administrativa, las familias reclamantes confían en que la justicia les restituya 34 hectáreas del predio ‘La Esmeralda’, ubicado en la vereda Seis de Mayo, además de diez hectáreas del predio ‘Pancoger’ y ocho hectáreas de la finca ‘Las Negritas’, nombres dados por las víctimas a las tierras donde aspiran volver.

Generales Política

A través de la Resolución 02110 del 13 de mayo, el Consejo Nacional Electoral, CNE, negó la solicitud de revocatoria del acto de elección de la candidata Ivon Manjarrez a la Alcaldía de La Jagua del Pilar, comicios que se llevarán a cabo este domingo 18 de mayo desde las 8:00 de la mañana y bajo estricta vigilancia de autoridades electorales por riesgos de trashumancia.

Los solicitantes de esta revocatoria son Germán Percy Rodríguez, William Augusto Jácome Urrea y Belisario Jiménez Luquez, bajo el señalamiento de que el padre de la candidata, reconocido compositor y notario, Rafael Manjarrez, ha hecho aportes a la campaña política.

La Sala Plena del Consejo Nacional Electoral evaluó los argumentos presentados por los demandantes y consideró que no se cumplen los supuestos y por consiguiente su candidatura sigue en firme, con el aval del Partido Alianza Social Independiente, ASI.

Lina Tomasa Soto Durán es la otra candidata en esta contienda electoral por el primer cargo del municipio de La Jagua del Pilar, sur de La Guajira, luego de que el Consejo de Estado de Colombia confirmó la nulidad de la elección de José Amiro Morón Núñez como alcalde para el periodo 2024-2027.

La sentencia fue emitida por la Sala de lo Contencioso Administrativo Sección Quinta, presidida por el magistrado Pedro Pablo Vanegas Gil, decisión que se basa en la causal de doble militancia en la modalidad de apoyo.

Ahora la batalla se dará en las urnas este domingo. El reto es realmente, según algunos sectores de opinión, la trashumancia electoral por la cual La Jagua del Pilar está bajo la lupa de autoridades electorales.

Generales Mundo

Murió José Pepe Mujica, a los 89 años, consideró que era tiempo de irse, según ha anunciado este martes el presidente de Uruguay, Yamandú Orsi, a través de las redes sociales.

Vencedor en mil batallas, Mujica perdió la guerra contra el cáncer. Primero en el esófago, y luego en el hígado. Cuando se comprobó la metástasis, estaba agotado y decidió tirar la toalla.

José Alberto Mujica Cordano, ese era su nombre completo, había nacido en 1935 en el barrio Paso de la Arena, en la periferia rural de Montevideo. Su madre era horticultora y su padre un pequeño estanciero que murió pobre en 1940, cuando Mujica tenía seis años. A los 14 años, el joven ya exigía en las calles reivindicaciones salariales para los obreros de su barrio. En 1964, se sumó a la guerrilla del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros. Estuvo preso cuatro veces y participó de dos escapes, uno de ellos legendario, en septiembre 1971, cuando 106 guerrilleros huyeron de la cárcel de Punta Carretas, en Montevideo, por un largo túnel cavado durante meses. Fue recapturado y en 1972 se convirtió en uno de los “nueve rehenes” del régimen militar: los cabecillas tupamaros presos serían ejecutados en prisión si su organización volvía a las armas.

En 2018, Mujica dejó, finalmente, la política activa. Abandonó su banca en el Senado con una carta a la presidenta del Congreso, su propia esposa, en la que alegó “motivos personales y cansancio del largo viaje”. Siguió, de todas formas, militando en el Frente Amplio y opinando sobre la actualidad a quien quisiese escucharlo. Cuando se enteró de que tenía cáncer prometió dar batalla, pero era evidente que ya estaba cansado. Hasta el final de sus días aclaró que no pretendía para sí el bronce de la historia. “Los hombres no hacemos historia, hacemos historieta”, dijo en una de sus últimas entrevistas.

Deportes

Con la presencia de la ministra del Deporte Patricia Duque Cruz, del presidente del Comité Paralímpico Colombiano, José Aldiver García Ospina y del director de Juegos Parasuramericanos Valledupar 2026, Elmer Jiménez Silva, este jueves 15 de mayo en la capital de Cesar se realizará un nuevo encuentro del Comité Organizador Local de los juegos (COL), espacio el que, se revisarán los avances de la organización de este importante evento del ciclo paralímpico, rumbo a Los Ángeles 2028.

Como es sabido el COL de los Juegos Parasuramericanos Valledupar 2026, está conformado por un representante de Mindeporte (ministra o delegado), Comité Paralímpico Colombiano, Gobernación de Cesar, Alcaldía de Valledupar y por un representante del sector productivo de la ciudad sede.

El próximo año, del 5 al 16 de julio más de 1.100 Para atletas de 12 países se darán cita en Valledupar, quienes se disputarán las medallas en 13 deportes y disciplinas presentes en el programa Parasuramericano.

Se viene concurso para el personaje oficial de Valledupar 2026

La organización de Juegos Parasuramericanos Valledupar 2026 alista las bases del concurso abierto para la creación del personaje oficial del histórico evento. Luego del balance del próximo COL en Valledupar, los interesados en participar conocerán los detalles para la creación de propuestas que serán evaluadas por un reconocido jurado calificador, quienes valorarán los diseños en función de los principios del deporte paralímpico, de lo que representa el evento Parasuramericano para la ciudad, el departamento y la región, atendiendo además a los elementos culturales y sociales de Valledupar.

Generales

En una actividad promovida por la Empresa de Servicios Públicos de Valledupar, Emdupar S.A. E.S.P., con el apoyo de Acueducto Metropolitano de Bucaramanga AMB, en cumplimiento del contrato 031, en el anexo 13, se inicia el proceso de formación en educación ambiental, con la cosmovisión de las comunidades indígenas, centrado en la protección del agua, la conservación de los recursos naturales y la gobernanza ambiental, incorporando de manera pedagógica la cosmovisión de las comunidades indígenas con asentamiento en la región.

La jornada tendrá una duración de dos meses, inició el 8 de mayo en el Colegio Leonidas Acuña, donde un grupo de miembros de las comunidades indígenas reconocidas por el Ministerio del Interior, realizó la capacitación a los estudiantes de esta institución. Otros planteles educativos incluidos serán Milciades Cantillo, Consuelo Araujo Noguera, Colegio Comfacesar y San Joaquín; de igual formase capacitará líderes de la comunidad de los barrios Alta Gracia, Los Mayales, Mayales Aeropuerto, Francisco de Paula, Altos de Comfacesar, y San Joaquín.

Esta capacitación tiene el propósito de incluir a una población educativa significativa que permitirá fortalecer el impacto social, ambiental y cultural de la intervención, de igual forma se ha dispuesto de un equipo pedagógico conformado por formadores indígenas con reconocimiento oficial y certificación vigente expedida por el Ministerio del Interior, quienes serán liderados por un coordinador general con formación profesional en Ingeniería Ambiental, quien velará por el rigor técnico, metodológico y cultural del proceso.

De acuerdo al agente especial, José Luis Palomino, “con esta actividad, Emdupar reafirma públicamente el compromiso con el que está transformando el territorio en un entorno de bienestar, y proyectarse con las realidades sociales y culturales de los territorios que atiende, queremos fortalecer la confianza ciudadana y ser un referente en gestión pública con enfoque territorial, social y ambiental”.

Arte y cultura

Cada mes de mayo, la Fundación Rafael Calixto Escalona Martínez, realiza en Valledupar diferentes actividades para conmemorar el aniversario de la partida y el natalicio del compositor más destacado de la música vallenata.

Es así como el próximo 13 de mayo, cuando se conmemora el décimo sexto aniversario del fallecimiento, para rendir tributo a su memoria, familiares y herederos de su tradición musical, así como artistas de la música vallenata, se darán cita en el cementerio Jardines del Eccehomo, donde reposan los restos del maestro, para contar anécdotas, interpretar algunas de sus canciones, y así reafirmar el gran legado que sigue vivo.

En este mismo sitio donde además se realizará una ofrenda floral, estará el Rey Vallenato 2025, Iván Zuleta Barros, la agrupación folclórica de los niños del Vallenato de la Escuela de Talento Rafael Escalona Martínez, quienes confirmaron su presencia a través de la Fundación Festival de la Leyenda Vallenata; además estará presente rindiéndole culto a la memoria de Rafa Escalona, ‘La Reina’ Margarita Doria.

Conversatorio cantado

Para conmemorar el natalicio del maestro, el próximo 26 de mayo, la Fundación proyecta la realización de un conversatorio-concierto titulado “La influencia de Escalona en el vallenato romántico”, en el cual se explorará cómo la vida musical de Rafael Escalona, a través de su lírica, dio vida a personajes emblemáticos en sus canciones, influenciando a los jóvenes de la época y consolidándose como un referente fundamental.

El evento contará con grandes figuras como Rafael Manjarrez, Gustavo Gutiérrez, Alberto ‘Beto’ Murgas, Santander Durán Escalona y Sergio Moya Molina, quienes compartirán sus relatos sobre los inicios de la música vallenata romántica y la profunda influencia que Rafael Escalona dejó en ellos. Asimismo, estos baluartes interpretarán en vivo las canciones del maestro Escalona que, según su criterio, marcaron el camino hacia el romanticismo en el vallenato.

Política

En cumplimiento del Decreto 2821 de 2013, que regula la creación de comisiones para la coordinación y seguimiento de los procesos electorales, la Administración Departamental de La Guajira convocó al Comité de Seguimiento Electoral 2025. Esta sesión se realizó el sábado 10 de mayo, de manera descentralizada con el objetivo de coordinar y asegurar el desarrollo normal de las elecciones atípicas de alcalde en el municipio de La Jagua del Pilar, garantizando los derechos y deberes de partidos y movimientos políticos.

Para garantizar la seguridad y transparencia del proceso electoral, que se llevará a cabo el próximo 18 de mayo, se dispondrá de un pie de fuerza compuesto por más de 200 uniformados de la Policía Nacional y tropas del Ejército Nacional.

Por su parte, la Registraduría Nacional del Estado Civil anunció que se implementará el sistema de biometría facial, tanto en la zona rural como urbana, lo que impedirá la suplantación de votantes. Este mecanismo, basado en el reconocimiento del rostro, permitirá verificar la identidad de quienes acudan a las urnas.

Además, se instalarán mesas de justicia en las zonas urbana y rural del municipio, integradas por funcionarios del Ministerio Público y de la Fiscalía General de la Nación. Estas mesas recibirán y tramitarán denuncias o quejas de ciudadanos, jurados de votación, testigos electorales y delegados de puesto sobre posibles irregularidades durante la jornada electoral.

La Misión de Observación Electoral (MOE) y el Consejo Nacional Electoral (CNE) han anunciado una vigilancia especial sobre este proceso, dado el historial de trashumancia electoral que registra el municipio. Según la Registraduría, hay actualmente 4.473 personas habilitadas para votar en La Jagua del Pilar, pero las cifras del DANE indican que solo 2.732 habitantes estarían en edad de votar, lo que evidencia un desfase significativo.

Esta diferencia ha sido objeto de preocupación, y ya se ha registrado una condena por este delito. Las autoridades han advertido que cualquier persona que se compruebe que ha cometido trashumancia electoral será capturada y judicializada. El objetivo es claro: que sean los verdaderos habitantes de La Jagua del Pilar quienes elijan a su alcalde, y que no se repita la historia de manipulación electoral en el municipio.

Según parece será una acción conjunta de las autoridades  judicializar a todo individuo que no tenga residencia ni actividad alguna en La Jagua del Pilar y reiterandose en su práctica transhumante se traslade a votar este 18 de mayo a  un municipio donde es realmente un extraño.

Cabe recordar que la trashumancia electoral es el acto de inscribir la cédula en un lugar distinto al de residencia con fines electorales, y constituye un delito contemplado en el Código Penal Colombiano bajo la figura de fraude en inscripción de cédulas.

Crónicas

Por: María Ruth Mosquera -@sherowiya-

 ❖ Relatos de preñeces, partos, ombligamientos y otras prácticas, a propósito de la conmemoración del Día de la madre y el Día Internacional de la Partería Tradicional, en el mes de mayo.

– Es una mujercita, dijo sudorosa Victorina, la partera.

– ¿Imposible?, respondió Miriam, ahogando un quejido al intentar incorporarse de la posición del parto, que la mantenía aún recostada con la cadera en el borde de la cama y las piernas espernancadas frente a la partera.

– “Sí señora. Tiene raja”, confirmó la partera.

A varios de sus hijos los había parido en cuclillas, agarrada con ambos brazos de cuerdas o sábanas que colgaban de las vigas de la casa, pero para esta ocasión, teniendo en cuenta que había sido un embarazo sin contratiempos, habían optado por esta que era una posición menos desgastante para la madre.

La llegada de una niña sorprendió a todos puesto que esperaban que naciera un varón, tal como lo indicaban las predicciones de las parteras y sabedoras en cuestiones de embarazos y alumbramientos, pues para este embarazo, la barriga de Miriam creció redonda y puntiaguda, sumado a que el bebé estaba situado al lado izquierdo, que es el lado donde se forman los hombres. “Las otras tres mujeres que tuve estaban del lado derecho, menos usted”, recuerda Miriam.

Fue un embarazo atípico. Después del nacimiento de su sexta hija, Miriam había retomado su vida normal de trabajo en la minería artesanal que implicaba extensas jornadas dentro de quebradas de agua muy fría, como ‘Angostura’ y ‘Juanamarcela’, de donde extraía oro y platino utilizando bateas que cargaba en la cabeza sobre rodetes o dentro de catangas en las que llevaba otras herramientas como cachos, almocafre y en ocasiones una barra para facilitar el desprendimiento de piedras o partir peñas cuando el terreno estaba muy duro. Algunas veces, cada una o dos semanas, hacía largas travesías para ir al colino a cosechar plátanos, bananos, primitivos y ñame, que eran la base de la alimentación familiar.

No sabe a ciencia cierta cuánto llevaba de retraso cuando notó la ausencia de su menstruación, pero no lo asoció a un embarazo porque no tenía ninguno de los malestares habituales de las seis veces anteriores; no sentía pesadez, ni antojos de comer papaya, ni nauseas matutinas. Fue sólo avanzado el tiempo, un poco más de dos meses, cuando empezó a sentir un abultamiento en la parte baja de su vientre y confirmó que efectivamente estaba preñada. Lo único que cambió en ella durante esos meses fue el tamaño de su barriga y un aumento desmedido en sus ganas de bailar.

La noche que precedió al parto, ella y otras mujeres del caserío se arreglaron temprano y se fueron al baile de batería que había en el pueblo contiguo; se fueron caminando río abajo, remangando sus vestidos hasta casi las nalgas, para atravesar los tramos más hondos. Al llegar a la última playa, se sacudieron el exceso de agua de las piernas y dejaron caer sus faldas. Ella llevaba un vestido color guayaba estampado con una combinación de florecitas ocre, blancas y verdes, y calzaba unas sandalias negras con una correa elástica que rodeaba el talón y que le proveían comodidad para el baile que siempre duraba toda la noche. Llegaron  en su momento preferido que los lugareños llaman ‘barrer el salón’, lo que significaba llegar a tiempo para bailar la primera pieza de la noche, que siempre era un pasillo. “Siempre comenzaban con tres pasillos”, recuerda Miriam, quien amaba este aire musical.  

Un ligero dolor acompañado de cierta pesadez en la parte baja del vientre la obligaron a detener una pieza de baile que acababan de empezar a tocar los músicos y sentarse pensativa. Al verla, una de sus compañeras se acercó y abrió los ojos como luna llena al escucharla decir: “a este muchachito la dio por nacer ahora”. Salió del salón a toda prisa y regresó con un joven boga que la ayudó a incorporarse y en una champa la regresó a casa.

Sorprendía la tranquilidad de Miriam, mientras las contracciones iban y veían cada vez con intervalos más cortos entre ellos. Dio las instrucciones para llamar a Victorina, la partera, y mientras la esperaba comenzó a caminar por toda la casa, como en un ritual, como quien conoce bien el paso a paso de lo que está a punto de suceder, como quien ya lo ha vivido muchas veces.

Por esos días habían menguado las usuales lluvias en esa zona selvática del Chocó, de modo que los caminos estaban secos y fue fácil para la partera y otras dos mujeres llegar, siendo más de la media noche, a la casa palafítica con piso de tablas y techo de zinc, construida en la orilla del río Suruco.

Victorina ejercía con destreza el arte de ayudar a parir a las mujeres de la comarca; si la criatura venía al revés, introducía su mano dentro de la parturienta y volteaba al niño para facilitar la salida de cabeza; sabía cuáles eran las plantas que debía macerar y hervir para darle a la madre el brebaje inicial de su recuperación en la cuarentena posparto, que para Miriam no pasaba de 12 días.  

En una esquina del cuarto, sobre una mesita artesanal, había un mameluco azul claro, con manoplas y medias del mismo color, en un tejido de hilos a mano, regalo de una amiga cercana que sería la primera muda del bebé. Un diminuto conjunto blanco con florecitas rosadas, cuatro pañales de tela, una toalla infantil de esas que tienen capucha y un catre con rejillas al estilo de corral, construido con palma, desgastado por el tanto uso, hijo tras hijo.  

El llanto de un recién nacido rompió el alba en las entrañas del Chocó. Miriam sintió alivio al ‘saberlo’ sano y mientras una de las presentes se aprestaba a traer el mameluco azul, escuchó la noticia de que había nacido mujer; se dio vuelta y buscó el conjunto blanco con florecitas. Nació flaquita y llorona, justo cuando se asomaba el sol, a las 5:30 de la mañana de ese domingo 21 de junio, día del sol, día del solsticio de verano en el hemisferio norte. Fue por eso por lo que después, al momento del bautizo, los padres estuvieron tentados a bautizarla Dominga.

Mientras las otras mujeres ayudaban a Miriam a asearse y limpiaban y vestían a la criatura, la partera se llevó el ombligo y la placenta a enterrar en la parte trasera de la casa, en la raíz de un árbol palo de guamas.  Había cortado el cordón umbilical y lo había pringado con mercurio. Días después, empezaron las curaciones habituales, que en la tradición negra del pacífico incluye ingredientes que influyen en el carácter del niño. Para este caso, Miriam consiguió araña picadora, conga, cola de ardilla y cabello de mellizo, tostó todos los ingredientes y los pulverizó en una piedra de moler, para hacer las curaciones a su hija.

Muchos años después, Miriam se sorprendería al notar una conexión casi mística de su hija con el sol, la cual entendió cuando ésta se lo explicó con una afirmación sencilla: “es que yo nací el día del sol, nací a la misma hora que él; nacimos conectados”.

Miriam tuvo un octavo embarazo. Tres años después, cuando pensaba que no tendría más hijos, quedó embarazada de nuevo, esta vez en un parto difícil, dio a luz a una niña que nació muerta. Según su relato, durante el embarazo fue víctima de una hechicería, por lo que, al momento de parir, con cada pujo, la niña en vez de salir, se le trepaba para la boca del estómago; cuando estaba a punto de morir ahogada con su bebé adentro, la partera, esta vez Pérside, le dio un brebaje con el que logró salvarle la vida a ella, pero la criatura no sobrevivió. “Ese fue un sepelio triste”, recuerda y añade que fue la única ocasión en que se presentaron problemas para tener a sus hijos, todos nacidos con la asistencia de parteras: “Todos mis hijos los tuve con parteras. Nunca supe qué fue ecografía, ni que los médicos rajaban a uno para sacarle el hijo; las pocas mujeres que no podían parir se morían con el hijo adentro, como le pasó a una muchacha de Juanamarcela, que no le pudieron sacar al muchachito y se murieron los dos”.

Hoy, ni Miriam ni su hija habitan su territorio. A menudo lo extrañan y aseguran que la historia sería distinta si allá no hubieran irrumpido los grupos armados, si no hubieran impuesto un nuevo orden social en su territorio, si no se hubieran apoderado de los negocios de la agricultura y la minería, si no hubieran arrasado con causes y riberas de los ríos, entre ellos el suelo donde enterraron el ombligo aquel domingo, donde nació aquella niña. No obstante, hoy Miriam pasa sus días con su hija, su hija menor, autora de este escrito, con el que le rinde homenaje a su progenitora, a propósito del Día de las madres.

Los ombligamientos: la tradición

En la tradición negra, las comadronas que atienden los partos entierran los ombligos y las placentas en un árbol que estuviera débil o que no quisiera parir y este se volvía fértil; era el árbol del recién nacido y se le ponía su nombre; se sembraba el ombligo para que el niño o niña creciera con buen juicio y estableciera su conexión con el territorio. Esta práctica ritual también implica las curaciones que se hacen a la herida que deja el cordón umbilical al ser cortado del recién nacido, para lo cual se hacen mezclas de plantas, animales y minerales que se pulverizan y se ponen en la herida y cuyas cualidades determinarán el carácter del pequeño.

La partería como patrimonio

En 2023, la Partería, los conocimientos, competencias y prácticas en torno a ella fueron inscritos en inscrito, por la Unesco, en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, afirmando que las matronas o parteras acompañan a las mujeres embarazadas y a sus familias antes, durante y después del parto. A lo largo del embarazo, las parteras realizan visitas domiciliarias, brindan consejos y cuidados, y ofrecen cursos de preparación para el parto. Contribuyen a la protección de los derechos humanos fundamentales transmitiendo sus conocimientos a las madres y a las familias. Basada en prácticas médicas y fundamentada en evidencia, conocimientos, habilidades y técnicas tradicionales, la partería puede variar según el entorno natural y sociocultural de las comunidades y países, e incluso puede incluir conocimientos en medicina tradicional y sobre plantas y hierbas medicinales.

La partería también comprende prácticas culturales, un vocabulario, celebraciones y rituales específicos. Los conocimientos y habilidades relacionados han sido preservados, enriquecidos y transmitidos por generaciones de practicantes, incluyendo a través de redes de mujeres. Los conocimientos tradicionales en partería se adquieren mediante la experiencia, la observación y la interacción directa con el cuerpo humano. Se transmiten mediante la enseñanza oral, la observación, la participación y el intercambio entre pares. En muchos países, el ejercicio de la profesión de partera también requiere certificación, y los conocimientos y habilidades correspondientes se transmiten en el marco de la educación formal, incluyendo la académica, a través de programas, a veces alineados con las normas establecidas por la Confederación Internacional de Parteras.

Día de la Partería Tradicional de Colombia

El pasado lunes 5 de mayo, las parterías tradicionales étnicas del pacífico colombiano fueron el centro de un acto histórico que tuvo lugar en Cali, Valle del Cauca, en el marco del Día de la Partería Tradicional de Colombia, donde presentaron oficialmente la iniciativa ‘Fortalecimiento y Reconocimiento de las Parterías Tradicionales Étnicas del Pacífico: Una Labor para la Vida y la Paz Total’, liderado por el Gobierno Nacional a través de la Agencia de Renovación del Territorio, ART, en alianza con el Fondo de Población de las Naciones Unidas, UNFPA, organizaciones y redes de parterías étnicas del pacífico y estructuras de gobierno propio en los territorios.

Allí estuvieron representantes de asociaciones de parteras y parteros tradicionales afrocolombianos e indígenas del pacífico y de la Federación Nacional de Parteras Tradicionales Afrodescendientes de Colombia, así como de delegados de los gobiernos étnicos de los Mecanismos Especiales de Consulta de las subregiones PDET del Pacífico, y de entidades gubernamentales nacionales, cooperación internacional y organismos multilaterales.

El sólo evento constituye un acto significativo de reconocimiento de la sabiduría y labor ancestral de parteras y parteros tradicionales, como actores esenciales para la vida, la salud y el cuidado en los territorios. La iniciativa de fortalecimiento se llevará a 29 municipios PDET de Chocó, Antioquia, Valle del Cauca, Cauca y Nariño, con el propósito de fortalecer el rol vital de las parteras y parteros tradicionales en los territorios, reconociendo la diversidad étnica, su aporte a la salud intercultural rural, la cultura y cuidado del territorio, y la construcción de paz con enfoque diferencial.

Glosario

Viga: Trozo de madera larga y resistente que se usa para sostener los techos de las casas.

Batea: recipiente redondo de madera en el que se recoge la tierra o arena para lavarla y extraer oro y platino.

Catanga: Canasto tejido de palma al que atan una cargadera que se sujeta con la cabeza, mientras la catanga reposa sobre la espalda.

Cacho: herramienta de la minería artesanal utilizada en la extracción de oro y platino; es un pedazo de madera que se utiliza para recolectar gravilla en bateas.

Almocafre: Es más conocido como azadilla y se utilizada en agricultura para limpiar las hierbas y para plantar o trasplantar, pero también en la minería.

Colino: Se refiere a sembrado plátano, banano y primitivo, especialmente.

Baile de Batería: Baile de música en vivo interpretada con instrumentos de viento y percusión, con predominio de la Jota chocoana, el Abozao y el Bunde, que son ritmos tradicionales del Chocó.  

Champa: es una embarcación de madera, como una canoa, sin motor, que se usa para el transporte en ríos.

Cuento

“El Cuento de Pedro”

Por: Pedro Norberto Castro Araújo 

Mucho se ha especulado sobre la idoneidad del jurado en la elección del nuevo rey del Festival de la Leyenda Vallenata, versión número 58; algunos insatisfechos han opinado de que no debió otorgársele la corona a Iván Zuleta Barros por razones de poca monta que no vienen al caso enunciar.

Lo cierto es que el nuevo rey  no necesito mucho para demostrar ante los asistentes, su talento para ejecutar los cuatro aires, sofocar los teclados de su acordeón y demostrar de qué está hecho; por cuanto en la actualidad es el mejor acordeonero que ha parido la provincia de Padilla. Su talento, talla, estirpe  y majestuosidad los ha demostrado a lo largo de su carrera musical; él es como el gallo fino cuando pisa la gallera y no encuentra  contendor.

A temprana edad, su padre Fabio Zuleta Baquero lo probó en escenarios donde se coronó como rey infantil y aficionado, llevando su talento por toda la patria en festivales de versión vallenata;  No en vano a sus 15 años interpretaba con gallardía el acordeón haciendo equipo con el más afamado cantante de la música vallenata: Diomedes Díaz Maestre.

Lo ocurrido en la tarima Colacho Mendoza del parque de la Leyenda Vallenata Consuelo Araujo Noguera no tiene discusión alguna; Zuleta Barros es el mejor acordeonista en el año 2025, coronándose no solamente como el número 58 sino como el primer rey de la dinastía Zuleta.

Como observador del certamen Festival Vallenato y en pro de que cada día sea mejor, con respecto al desfile de Willis parranderos y el desfile de piloneras, eventos que  han crecido vertiginosamente; pienso que deben organizarse de mejor forma y para ello debemos juntar los esfuerzos de las autoridades locales y de  quienes apoyamos el festival llevando al desfile nuestros 4×4, lo hacemos con recursos propios sin obtener nada a cambio. Igual sucede con el desfile de piloneras, el esfuerzo lo hacen las empresas y los grupos folclóricos atraídos por el entusiasmo de quien lo vive es quien lo goza pero recuérdese que no solamente vivimos del entusiasmo, cualquier evento resulta oneroso y el estímulo de parte de la Fundación es ninguno. Ni siquiera para donarle las boletas a los participantes.

Si corremos el tiempo hacia atrás siempre el acto de inauguración del festival queda flojo, las galerías orientales y occidentales siempre las encontramos vacías y olvidadas, ninguna autoridad municipal se ha pellizcado para donar las boletas o distribuirlas entre los líderes locales  para que estos a su vez las entreguen a las comunidades y como se hace en tiempos de política, garantizarles el transporte de ida y regreso a esas personas que nunca han asistido al festival.

En 1968 Emiliano Zuleta Baquero, participó en el primer festival vallenato, donde se coronó como rey Alejo Durán. Zuleta  con grandeza reconoció la maestría de su opositor. Para ser rey no se necesita tener la corona se necesita ganarse el reconocimiento de toda una sociedad, de allí para abajo los Zuleta con Poncho y Emilianito a la cabeza, han inmortalizado el vallenato tradicional el cual se ha internacionalizado y trasmitido a una generación de descendientes quienes tienen la responsabilidad de mantenerlo en la cúspide. 

Los Zuleta  para ser grande no han necesitado de corona alguna son grandes y punto.